Está claro que el fútbol, además de 22 jugadores, una cancha donde jugar y una pelota, necesita de alguien que imparta justicia. Y justamente fueron ellos, los árbitros, los que dijeron basta y tomaron la determinación de parar el fútbol doméstico por tiempo indeterminado, o por lo menos hasta que el Tribunal de Disciplina tome la resolución definitiva sobre los hechos violentos de los que fueron víctimas varios de los jueces en los últimos días.
La decisión se tomó en la noche de ayer en una asamblea que se llevó a cabo en uno de los salones de la sede de la LPF. La medida afectará desde Primera División hasta la categoría Cebollitas.
No quedan dudas que más allá de alguna equivocación dentro de un encuentro, por más grosera que fuese, nada justifica lo que ocurrió, lo cual lamentablemente no deja de sorprender en un certamen que se ha tornada cada vez más violento e intolerante, en todo punto de vista.
LO QUE PASÓ, LAS DETERMINACIONES DEL TRIBUNAL.
El fin de semana pasado, en el marco de la 2ª fecha del torneo Clausura, el juez José Setau fue agredido por cuatro jugadores de la categoría Sub 20 de Sarmiento de Crespo. El Tribunal de Disciplina (TDD) resolvió la suspensión provisoria de Darío Fabián Gutiérrez, Brian Miguel Villanueva, Ángel Alejandro Cárdenas, y Jonatan Ezequiel Smith. Al club y a los jugadores se les otorgó un plazo de 10 días para hacer su descargo.
La misma sanción -suspensión provisoria con tiempo para apelar- fue para el jugador de Palermo Lucas Mendoza, quien el pasado sábado agredió con golpes de puño y patadas al árbitro Alexis Romero (también se resolvió darle el partido ganado a Sportivo Urquiza 2-0).
En tanto que donde si hubo un fallo definitivo fue sobre las agresiones verbales que padeció la jueza Miriam Trapp por parte de Abel Almada, integrante del club Patronato, en un partido de la categoría 2003. En dicho encuentro la árbitro también fue víctima de algunos padres. El TDD dictaminó amonestar a Patronato y a
Almada.
LA VOZ OFICIAL DE LOS JUECES.
Roberto González, quien se transformó en el vocero del resto de sus compañeros, charló con EL DIARIO y explicó lo que se determinó en la asamblea. “Estuvimos reunidos la mayoría de los árbitros y decidimos no jugar más hasta que el Tribunal de Disciplina se expida con el fallo definitivo sobre los hechos que ocurrieron”, contó el Bocha y agregó que lo que pasó en estos días “ha sido una vergüenza, rebalsó el vaso” y aseguró que los árbitros “estamos todos juntos en esta determinación”. En cuanto a los pasos a seguir, uno de los árbitros más experimentados del orden local dijo: “Solicitamos para el próximo miércoles una reunión con los integrantes del Tribunal de Disciplina, queremos hablar con ellos y luego veremos que pasa”.
ÚLTIMO ANTECEDENTE
Hay que remontarse hasta el año 2005 para encontrar una situación similar. En aquella ocasión, Juan Barrios, quien estaba vistiendo la camiseta de Sportivo Urquiza, agredió físicamente al árbitro Francisco Aguilera. En aquella ocasión la Mesa Directiva de la LPF fue la que tomó la decisión de suspender la actividad oficial por una semana a raíz del hecho, en tanto que el Tribunal de Disciplina le dio una dura y ejemplificadora sanción al jugador suspendiéndolo con dos años sin poder participar de un certamen liguista.
Fuente: http://www.eldiario.com.ar/diario/deportes/nota.php?id=141631
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