martes, 26 de noviembre de 2013
Córdoba le rindió honores a la barra de Talleres
Por iniciativa del legislador justicialista, Carlos Alessandri, la barra brava de Talleres, recibió una plaqueta dorada en reconocimiento a su ¨buen comportamiento en las distintas canchas del país y su compromiso para erradicar la violencia en el fútbol¨.
La entrega de la placa fue aprobada por mayoría, aunque son críticas de algunos presentes. De hecho, la legisladora Liliana Olviero, del Frente de Izquierda, aseguró: ¨Me parece un desatino absoluto que, habiendo tantos temas por tratar, se distiga a una barra del fútbol¨. Sin embargo Carlos Alessandri dijo: ¨Nostros destacamos la labor de una fundación que pregona un fútbol sin violentos y que ayuda a muchísima gente con sus filiales¨.
¨Los barras son un condimento especial para darle color y calor a las jornadas deportivos¨, afirmó Alessandri, impulsor del proyecto.
Los violentos siguen ganando
El partido entre Los Andes y Atlanta fue suspendido. La Policía encontró a metros del estadio armas de fuego, facas y municiones. El titular del APreViDe, Oscar Boccalandro, señaló que la decisión se tomó porque “corría el riesgo de vida de muchas personas”. Hay, por lo menos, 20 detenidos.
El encuentro correspondiente a la fecha 18 del torneo de la B metropolitana, estaba previsto para las 17.30. Los Andes reciba en el estadio, Eduardo Gallardón, a Atlanta. A falta de 30 minutos y gracias a las requisas realizadas por la Policía Bonaerense se encontró un arsenal de armas de fuego, facas y municiones a pocos metros del estadio, las cuales pertenecían a la barra del Milrayitas.
Al encontrar el arsenal, fueron detenidos unas 20 personas. Como medida preventiva, las autoridades encargadas de la seguridad decidieron suspender el encuentro. La decisión se tomo para evitar que pueda haber enfrentamientos entre las dos facciones de la barra brava del club de Lomas de Zamora.
El titular del APreViDe, Oscar Boccalandro, explicó el porqué de la suspensión: “Fue una decisión que tomó el Ministerio de Seguridad, en función de secuestro de armas de fuego, veinte detenciones, facas a escasos metros del estadio, destinadas a ejercer actos de violencia. Tenemos como premisa la valoración de la vida humana y acompañamos la medida que se tomó, que tiene que ver con preservar la vida de la gente común que venía hoy a ver a Los Andes, pero estas personas están dispuestas a todo”.
“Se tomaron todas las medidas precautorias y se hicieron todas las requisas en la previa del partido y, producto de eso, se tomó la decisión. Era un partido de riesgo medio, ya que no había público visitante, además con un padrón reducido porque solo podían ingresar los socios”, defendió su accionar Boccalandro.
También, indicó que estudiarán lo ocurrido para determinar si tomarán alguna medida contra la institución de Lomas de Zamora: “La sanción al club, de haber, será evaluada durante la semana”.
La sanción o el cambio se tiene que emplear lo antes posible. Es prioridad cortar con los incidentes de violencia. En el estadio Gallardón se vienen registrando desde hace algunas fechas. En el clásico con Temperley, hubo hechos de violencia en la platea, mientras que con Colegiales, en la popular local, durante el partido se pudo ver corridas, personas apuñaladas y golpes de puño.
El encuentro correspondiente a la fecha 18 del torneo de la B metropolitana, estaba previsto para las 17.30. Los Andes reciba en el estadio, Eduardo Gallardón, a Atlanta. A falta de 30 minutos y gracias a las requisas realizadas por la Policía Bonaerense se encontró un arsenal de armas de fuego, facas y municiones a pocos metros del estadio, las cuales pertenecían a la barra del Milrayitas.
Al encontrar el arsenal, fueron detenidos unas 20 personas. Como medida preventiva, las autoridades encargadas de la seguridad decidieron suspender el encuentro. La decisión se tomo para evitar que pueda haber enfrentamientos entre las dos facciones de la barra brava del club de Lomas de Zamora.
El titular del APreViDe, Oscar Boccalandro, explicó el porqué de la suspensión: “Fue una decisión que tomó el Ministerio de Seguridad, en función de secuestro de armas de fuego, veinte detenciones, facas a escasos metros del estadio, destinadas a ejercer actos de violencia. Tenemos como premisa la valoración de la vida humana y acompañamos la medida que se tomó, que tiene que ver con preservar la vida de la gente común que venía hoy a ver a Los Andes, pero estas personas están dispuestas a todo”.
“Se tomaron todas las medidas precautorias y se hicieron todas las requisas en la previa del partido y, producto de eso, se tomó la decisión. Era un partido de riesgo medio, ya que no había público visitante, además con un padrón reducido porque solo podían ingresar los socios”, defendió su accionar Boccalandro.
También, indicó que estudiarán lo ocurrido para determinar si tomarán alguna medida contra la institución de Lomas de Zamora: “La sanción al club, de haber, será evaluada durante la semana”.
La sanción o el cambio se tiene que emplear lo antes posible. Es prioridad cortar con los incidentes de violencia. En el estadio Gallardón se vienen registrando desde hace algunas fechas. En el clásico con Temperley, hubo hechos de violencia en la platea, mientras que con Colegiales, en la popular local, durante el partido se pudo ver corridas, personas apuñaladas y golpes de puño.
Matias Ponce de León
Traición a sangre
Dos hermanos se disputan el liderazgo de la hinchada del Deportivo Merlo
La violencia en el fútbol argentino se ha tornado habitual. Pero este caso tiene condimentos muy particulares. Deportivo Merlo, institución que milita en la Primera B Metropolitana tiene dos facciones que se disputan el poder de la barra. Lo curioso es que dos hermanos, Carlos y Dante Salazar, son quienes lideran estos bandos. La familia Salazar está compuesta por siete hermanos y María Inés Díaz, la madre. Dante y Carlos desde hace 13 años están enfrentados a muerte por ser los líderes de la barra del Charro.
Todo comenzó en el año 1999. Dante era jugador del club. En ese mismo año es apresado junto a uno de sus hermanos apodado Cuni por violación y homicidio. Mientras que su otro hermano Carlos, alias Caio también es detenido por robo. Al poco tiempo, los dos primeros son absueltos, mientras que Carlos es liberado a los pocos meses.
En el 2000, Jorge Salazar, el padre de ambos falleció. Jorge, fue un referente de la popular durante 20 años. Cuando él murió los dejó a cargo sus hijos. Con el padre muerto, los hermanos pretenden adueñarse de la popular. La tarea no les fue fácil. Un grupo de Barrio Matera era quien lideraba en ese momento. Carlos, Cuni y Dante consiguen recuperar el lugar a fuerza de balas y riñas. La relación marchaba bien, hasta que en 2005 Caio vuelve a ser detenido. Desde entonces, los Salazar manejaban la barra y el club.
En 2008 Carlos sale de la cárcel y comienza la guerra. A partir de allí comienzan las reyertas internas. Se desató la batalla por el liderazgo de la hinchada. Caio y Cuni se unen con Barrio Matera, mientras que Dante forma su grupo de Parque San Martín
Durante uno de los enfrentamientos, el grupo que responde a Dante baleó la casa donde vive Carlos con su madre. María fue gravemente herida en el abdomen y durante varios días estuvo internada. Otro episodio de violencia fue durante un partido ante Deportivo Morón. Esa vez, ambos bandos se arrojaron piedras y se enfrentaron con armas de fuego fuera del estadio. Este incidente terminó con un balazo en la pierna para Dante Salazar.
Esta historia está entremezclada por cuestiones políticas, a Carlos, alias “Caio” se lo ha vinculado fuertemente al Intendente de Merlo, Raúl Othacehé. Mientras que a Dante al candidato a Concejal del Massismo, Menéndez.
Desde el municipio de Merlo le propusieron a Caio trabajar para el Intendente Othacehé. La tarea era llevar gente a los actos a cambio de apoyo en la tribuna. A él se le une Cuni. Esto a Dante no le gustó nada. Por lo tanto se negó a ceder el tablón.
Al día de hoy, Caio lidera la facción de Barrio Matera, la cual fue desplazada por los del Parque San Martín que responde a Dante.
La lucha por el mando, por el poder que se construyó en el mundo del fútbol es simbólica pero a la vez es real. Ser un hincha caracterizado implica tener contactos con gente de la política, dirigentes del club, encargados de la seguridad para burlar los derechos de admisión. A la vez el negocio, por más que sea una institución chica del ascenso, hay dinero, hay entradas de favor.
Por otra parte, se los utiliza como fuerza de choque en la política, sobre todo en época de elecciones.
Tiempo atrás, Dante afirmó que él “mata y muere por Merlo” y además aclaró que su única familia es Deportivo Merlo y la gente de la barra. No le importa estar peleado a muerte con su hermano Carlos y con otros tres más. A ninguno les preocupa enfrentarse entre sí.
Este conflicto va más allá del fútbol y la violencia. Siendo de la misma familia, de la misma sangre, se odian y se disputan ser los jefes de la hinchada del Deportivo Merlo.
En el último encuentro, disputado en el estadio de Merlo ante Barracas Central se oyeron disparos de armas de fuego en la zona aledaña. La tropa de Matera se enfrentó a los tiros a los de Parque San Martín.
No hay tregua. Nadie quiere aflojar en esta lucha.
Pese a tener derecho de admisión, Dante tiene gente que lo representa en la tribuna. Actualmente los días de partido hay una hinchada de cada lado y se desafían con cánticos y amenazas.
Dirigentes, socios e hinchas genuinos se ven afectados. Los socios deben concurrir a la platea para no tener problemas con nadie.
El fútbol, el club y una madre sufren a causa de la violencia desmedida por parte de dos hermanos que se odian y se quieren matar. Una familia dividida por el control de la tribuna.
La violencia en el fútbol argentino se ha tornado habitual. Pero este caso tiene condimentos muy particulares. Deportivo Merlo, institución que milita en la Primera B Metropolitana tiene dos facciones que se disputan el poder de la barra. Lo curioso es que dos hermanos, Carlos y Dante Salazar, son quienes lideran estos bandos. La familia Salazar está compuesta por siete hermanos y María Inés Díaz, la madre. Dante y Carlos desde hace 13 años están enfrentados a muerte por ser los líderes de la barra del Charro.
Todo comenzó en el año 1999. Dante era jugador del club. En ese mismo año es apresado junto a uno de sus hermanos apodado Cuni por violación y homicidio. Mientras que su otro hermano Carlos, alias Caio también es detenido por robo. Al poco tiempo, los dos primeros son absueltos, mientras que Carlos es liberado a los pocos meses.
En el 2000, Jorge Salazar, el padre de ambos falleció. Jorge, fue un referente de la popular durante 20 años. Cuando él murió los dejó a cargo sus hijos. Con el padre muerto, los hermanos pretenden adueñarse de la popular. La tarea no les fue fácil. Un grupo de Barrio Matera era quien lideraba en ese momento. Carlos, Cuni y Dante consiguen recuperar el lugar a fuerza de balas y riñas. La relación marchaba bien, hasta que en 2005 Caio vuelve a ser detenido. Desde entonces, los Salazar manejaban la barra y el club.
En 2008 Carlos sale de la cárcel y comienza la guerra. A partir de allí comienzan las reyertas internas. Se desató la batalla por el liderazgo de la hinchada. Caio y Cuni se unen con Barrio Matera, mientras que Dante forma su grupo de Parque San Martín
Durante uno de los enfrentamientos, el grupo que responde a Dante baleó la casa donde vive Carlos con su madre. María fue gravemente herida en el abdomen y durante varios días estuvo internada. Otro episodio de violencia fue durante un partido ante Deportivo Morón. Esa vez, ambos bandos se arrojaron piedras y se enfrentaron con armas de fuego fuera del estadio. Este incidente terminó con un balazo en la pierna para Dante Salazar.
Esta historia está entremezclada por cuestiones políticas, a Carlos, alias “Caio” se lo ha vinculado fuertemente al Intendente de Merlo, Raúl Othacehé. Mientras que a Dante al candidato a Concejal del Massismo, Menéndez.
Desde el municipio de Merlo le propusieron a Caio trabajar para el Intendente Othacehé. La tarea era llevar gente a los actos a cambio de apoyo en la tribuna. A él se le une Cuni. Esto a Dante no le gustó nada. Por lo tanto se negó a ceder el tablón.
Al día de hoy, Caio lidera la facción de Barrio Matera, la cual fue desplazada por los del Parque San Martín que responde a Dante.
La lucha por el mando, por el poder que se construyó en el mundo del fútbol es simbólica pero a la vez es real. Ser un hincha caracterizado implica tener contactos con gente de la política, dirigentes del club, encargados de la seguridad para burlar los derechos de admisión. A la vez el negocio, por más que sea una institución chica del ascenso, hay dinero, hay entradas de favor.
Por otra parte, se los utiliza como fuerza de choque en la política, sobre todo en época de elecciones.
Tiempo atrás, Dante afirmó que él “mata y muere por Merlo” y además aclaró que su única familia es Deportivo Merlo y la gente de la barra. No le importa estar peleado a muerte con su hermano Carlos y con otros tres más. A ninguno les preocupa enfrentarse entre sí.
Este conflicto va más allá del fútbol y la violencia. Siendo de la misma familia, de la misma sangre, se odian y se disputan ser los jefes de la hinchada del Deportivo Merlo.
En el último encuentro, disputado en el estadio de Merlo ante Barracas Central se oyeron disparos de armas de fuego en la zona aledaña. La tropa de Matera se enfrentó a los tiros a los de Parque San Martín.
No hay tregua. Nadie quiere aflojar en esta lucha.
Pese a tener derecho de admisión, Dante tiene gente que lo representa en la tribuna. Actualmente los días de partido hay una hinchada de cada lado y se desafían con cánticos y amenazas.
Dirigentes, socios e hinchas genuinos se ven afectados. Los socios deben concurrir a la platea para no tener problemas con nadie.
El fútbol, el club y una madre sufren a causa de la violencia desmedida por parte de dos hermanos que se odian y se quieren matar. Una familia dividida por el control de la tribuna.
Popular de Deportivo Merlo
Jorge Herrera
¿Quién dará el ejemplo?
La semana pasada el ex jugador de Boca, Martín Palermo, pedía que tranquilidad, luego de la pelea que protagonizaron los jugadores de Godoy Cruz y Boca. Días antes, el entrenador de Quilmes, Nelson Vivas, fue sacado de su cargo tras irse a las manos con un plateísta. Esta semana, los protagonistas son los jugadores, cuerpo técnica y hasta los alcanza pelotas de Arsenal y Gimnasia de la Plata.
Las últimas fechas del fútbol argentino se vieron teñidas de negro tras varios incidentes, provocados por jugadores y un director técnico. No solo esta la eterna pelea entre barras, hinchas y demás entre los diferentes clubs, sino que ahora, las figuras toman ese rol.
En orden cronológico, el primero en nombrar es Nelson Vivas. Al terminar el partido, uno de los plateístas cuestionó la racha del cervecero, y la reacción del DT fue pegarle. En este caso, el que salió a hablar fue el presidente del club, Aníbal Fernández, y se refirió al incidente y la salida del entrenador: "Sabe que metió la pata, entiende que la situación es incómoda, también para el club y está arrepentido. Bregamos por todos los medios bajar la violencia y él no puede cometer un error de esas características".
Para continuar, esta el bochorno de Mendoza sigue dando tela para cortar. parte del director técnico del Tomba, Matías Caruzzo, uno de los protagonistas de la pelea, salió a hablar. “Es complicado para los árbitros ver que es lo que pasa en ese momento. Fue una equivocación de los jugadores. Seguramente ellos, al igual que nosotros, están arrepentidos". También agregó: “Veo que Curbelo le tira tres piñas a Ledesma. Además, cuando entrás a separar, a veces te metés en la vorágine del momento”.
Por último, el empate que estaban sacando, Arsenal y Gimnasia, a pesar de no servirle a ninguno de los dos, termino en una batalla campal. El local reclamaba al árbitro detener el partido porque la pelota estaba desinflada. Al reanudarse el encuentro, los jugadores de Gimnasia esperaban que le devolvieran al pelota. El rival se quedó con la pelota después del pique, y se desató la pelea. Marcone le pegó un codazo a Pereyra y Aguirre un cabezaso.
Los dos bancos de suplentes y equipo técnico, corrieron a separar, aunque fueron pocos los que hiciero esto. El córner derecho fue el testigo de la batalla campal entre ambos equipos. Hasta el entrenador de Arsenal, Gustavo Alfaro, recibió un golpe al intentar parar la pelea. Cuando se calmaron y separaron, casi por insistencia de ambos DTs, el árbitro comenzó a ver quién iba a recibir la tarjeta roja. Mussis, Gastón Díaz y Matías García por el lado de Gimnasia; Nico Aguirre y Damián Pérez, de Arsenal.
El jugador de Gimnasia, Dardo Miloc comentó : "Nosotros jugamos todas las pelotas como si fuera la última". Por otra parte, el volante de Arsenal, Iván Marcone dijo: "En el primer tiempo nosotros le devolvimos una pelota a Monetti, ellos tendrían que haber hecho lo mismo". Parece poco para semejante papelón.
El fútbol esta sucio. No solo los jugadores deben dar el ejemplo, sino que con estas acciones, siguen avalando algo que no debería existir en un deporte: la violencia. Las sanciones son leves. Las expulsiones o las fechas que se dan, son un chiste. Los hinchas quieren ver fútbol. Si no lo quisieran, mirarían las peleas de boxeo.
Pelea entre los jugadores de Godoy Cruz y Boca.
Las últimas fechas del fútbol argentino se vieron teñidas de negro tras varios incidentes, provocados por jugadores y un director técnico. No solo esta la eterna pelea entre barras, hinchas y demás entre los diferentes clubs, sino que ahora, las figuras toman ese rol.
En orden cronológico, el primero en nombrar es Nelson Vivas. Al terminar el partido, uno de los plateístas cuestionó la racha del cervecero, y la reacción del DT fue pegarle. En este caso, el que salió a hablar fue el presidente del club, Aníbal Fernández, y se refirió al incidente y la salida del entrenador: "Sabe que metió la pata, entiende que la situación es incómoda, también para el club y está arrepentido. Bregamos por todos los medios bajar la violencia y él no puede cometer un error de esas características".
Para continuar, esta el bochorno de Mendoza sigue dando tela para cortar. parte del director técnico del Tomba, Matías Caruzzo, uno de los protagonistas de la pelea, salió a hablar. “Es complicado para los árbitros ver que es lo que pasa en ese momento. Fue una equivocación de los jugadores. Seguramente ellos, al igual que nosotros, están arrepentidos". También agregó: “Veo que Curbelo le tira tres piñas a Ledesma. Además, cuando entrás a separar, a veces te metés en la vorágine del momento”.
Por último, el empate que estaban sacando, Arsenal y Gimnasia, a pesar de no servirle a ninguno de los dos, termino en una batalla campal. El local reclamaba al árbitro detener el partido porque la pelota estaba desinflada. Al reanudarse el encuentro, los jugadores de Gimnasia esperaban que le devolvieran al pelota. El rival se quedó con la pelota después del pique, y se desató la pelea. Marcone le pegó un codazo a Pereyra y Aguirre un cabezaso.
Los dos bancos de suplentes y equipo técnico, corrieron a separar, aunque fueron pocos los que hiciero esto. El córner derecho fue el testigo de la batalla campal entre ambos equipos. Hasta el entrenador de Arsenal, Gustavo Alfaro, recibió un golpe al intentar parar la pelea. Cuando se calmaron y separaron, casi por insistencia de ambos DTs, el árbitro comenzó a ver quién iba a recibir la tarjeta roja. Mussis, Gastón Díaz y Matías García por el lado de Gimnasia; Nico Aguirre y Damián Pérez, de Arsenal.
El jugador de Gimnasia, Dardo Miloc comentó : "Nosotros jugamos todas las pelotas como si fuera la última". Por otra parte, el volante de Arsenal, Iván Marcone dijo: "En el primer tiempo nosotros le devolvimos una pelota a Monetti, ellos tendrían que haber hecho lo mismo". Parece poco para semejante papelón.
El fútbol esta sucio. No solo los jugadores deben dar el ejemplo, sino que con estas acciones, siguen avalando algo que no debería existir en un deporte: la violencia. Las sanciones son leves. Las expulsiones o las fechas que se dan, son un chiste. Los hinchas quieren ver fútbol. Si no lo quisieran, mirarían las peleas de boxeo.
María Julieta Castro
La violencia sin paz
La muerte de la barra del Club Atlético Colegiales no es solo una cuestión futbolística, sino también política. Diversas versiones afirman un complot, en cara a las elecciones de octubre.
La violencia en el deporte de los argentinos no tiene fin. En un nuevo capítulo, el "Pocho" Morales fue asesinado el domingo 13 de octubre. También hubo otros dos barras heridos, todos trasladados al Hospital de Vicente López.
El hecho ocurrió en la puerta de su casa, ubicada en Munro, localidad de Vicente López. De una camioneta, bajo un grupo de personas, que insultaron al barra y abrieron fuego. La víctima murió en el lugar, por causa de seis disparos, según confirmaron fuentes policiales.
Todo comenzó por una interna en la hincha de Colegiales, no siendo un incidente aislado. De hecho, en los últimos tiempos se vienen dando situaciones idénticas en la mayoría de las barras de la categoría. Lo curioso, es que no son los autores hinchas de otros clubes, sino de los que "quieren" los mismos colores.
El "Pocho" estuvo involucrado días atrás en los aprietes al plantel del club por la mala campaña que tiene. De hecho, Cole tuvo varios cambios en la dirección técnica por este motivo. El jefe de la barra era integrante de Hinchadas Unidas Argentinas. Esta ONG, creada en el 2009, fue creada por el actual gobierno nacional, para evitar mas muertes en el fútbol. Esto no funcionó como debía ya que en el Mundial de Alemania, fueron protagonistas de varios incidentes.
La tensión aumentó aún más, en medio de versiones que vinculan el asesinato, con la campaña electoral. De hecho el presidente de Colegiales, es candidato a concejal en la lista del Frente para la Victoria, en Vicente López. La barra esta dividida en dos grupos: unos del PRO, actual gobierno de la localidad de zona norte, y otros simpatizantes del gobierno nacional. De hecho, la víctima era militante K.
Según afirman fuentes policiales, habría involucrado un cuarto hombre, que se hallaba con Morales en el momento de ser atacado, en el cruce de las calles Mitre y San Lorenzo, de la localidad de Munro .El hecho está siendo investigado por personal de la Jefatura Departamental de San Isidro y por la fiscal descentralizada de Vicente López Oeste, Marcela Semería.
Elecciones 2013
En medio de la campaña, el asesinato dió que hablar en el ámbito de la política. Como respuesta a fuertes acusaciones de parte del kirchnerismo contra el Pro, el diputado provincial K, Guido Lorenzino, aseguro que los que mataron al barra, están contratados por el Frente Renovador de Vicente López para hacer pegatinas de afiches en Munro.
Por otra parte, ya fueron señalados dos ex miembros de la barra de Colegiales, como autores del asesinato del líder de la hinchada. Ambos, según Fernando Navarro, diputado provincial, dijo que responden a César Torres, secretario del gobierno de Macri en Vicente López. También sostuvo que los detenidos estaban haciendo pintadas para Macri y Massa.
Los responsables son Alejandro Aranda, alias "Harry", y Martín Cabrera, alias "El Negro Martín", quienes también tuvieron que ser llevados al hospital, por heridas de arma blanca. Ambos fueron señalados por dirigentes e hinchas de Colegiales, además de ser vinculados al gobierno municipal. Desde hace un tiempo los barras acusados, mezclaron su amor por el Tricolor con la política. Apoyan la campaña de Macri, y ahora del Frente Renovador.
Si bien Aranda y Cabrera están detenidos, no serían los que dispararon. La oposición al PRO, en Vicente López, habría denunciado desde hace meses los aprietes de los acusados, ya que serían los encargados de las patotas. "Esto es parte de una andanada de violencia desde las PASO. Nos bloquean las camionetas de afiches y golpearon el sábado pasado a un compañero que intentó instalar una mesa de difusión en la plaza", afirmó Joaquín Noya, candidato a concejal por el Frente para la Victoria.
"Sólo puedo decir cosas buenas de él. Siempre fue muy leal y hemos tenido muy buena relación, no sólo conmigo sino con toda la comisión directiva", contó quien encabezó esa institución entre 2008 y 2012, Enrique Banchs. "Era alguien que quería al club. Siempre hay algún problemita pero nunca nada grave." Y con respecto a la posible pelea con el "Negro" Martín, concluyó: "No conozco quién es."
La disputa comenzó por la una pelea por la conducción del club. Según fuentes oficiales, la presencia de la barra impedía que los sospechosos, y a un ex dirigente de Colegiales, ingresar nuevamente a la cúpula del club. "Pocho siempre se opuso a que se hicieran negocios en el club y bancó a la comisión directiva para que no ingresaran estos barras y dirigentes. El domingo, contrataron a un sicario para matarlo y poder liberar el ingreso al club", aseguró Rodrigo Gonzaléz, dirigente de Colegiales.
Como si fuera poco
La muerte del barra no fue solo noticia, sino también su sepelio.En la caravana cuando se dirigían al cementerio, varios participantes fueron protagonistas de diferentes incidentes en la localidad de Munro. En el cortejo iban colectivos, autos, y motos, con varios hinchas vestidos con los colores de Colegiales.
Entre los principales afectados, el Palacio Municipal tuvo su parte. Varios allegados a Morales creen que el suyo fue un asesinato político y no un problema "entre barras", como afirmaron desde el municipio.
María Julieta Castro
Pánico y locura en el shopping
Un grupo de alrededor de 50 personas, al parecer integrantes de la barra de Platense, atacaron el centro comercial y generaron todo temor entre los casuales visitantes que se encontraban en el lugar.
El hecho ocurrió pasadas las 18.30, en la previa del partido con Chicago, cuando un grupo de 50 integrantes de “la barra del Calamar”, ingresaron al Shopping Dot. Rompieron vidrieras y distintas instalaciones. También saquearon varios locales y robaron pertenencias a los empleados que encontraban allí. Los agresores reaccionaron por los rumores que indicaban que el centro comercial quiso prohibir que Platense juegue sus partidos los fines de semana en su cancha que se encuentra frente al establecimiento.
Las personas que entraron de manera violenta al lugar, luego de golpear a empleados, provocar destrozos y robar, huyeron rápidamente. Por el incidente intervino en el lugar personal de la comisaría 49, del barrio porteño de Villa Urquiza.
El caos e ingreso de los hinchas generó corridas, pánico y cierre de locales. Al respecto, algunos empleados del centro comercial, dijeron que se escucharon disparos fuera del lugar, aunque luego confirmaron que se trataban de bombas de estruendo.
Sergio Datillo, vocero del grupo empresario dueño del Dot, detalló que fueron unos 50 barras de Platense los que generaron los disturbios y describió la situación: ¨Una silla quedó incrustada en uno de los vidrios. Le robaron celulares a algunos empleados". Además agregó: ¨No se le puede encontrar una lógica a lo que hacen estos delincuentes¨.
Desde la gerencia del shopping, ubicado en el barrio de Saavedra, informaron que hay dos agentes de su propia seguridad privada que fueron golpeados. Uno de los empleados relató: “Los violentos se ensañaron con una cafetería y destrozaron varios locales, el más afectado fue Falabella, en donde saquearon perfumes, ropa y distintos objetos".
El viernes anterior al hecho, el Presidente de Platense, Pedro Vilariño, mantuvo un encuentro con autoridades del centro comercial, luego de que trascendió un supuesto pedido del shopping para que el club no juegue los fines de semana en su estadio.
En la reunión, de acuerdo a Andrés Stahler, vocero del club, dijo: "Quedó muy avanzado un acuerdo económico para que el DOT invierta en el Club Atlético Platense. Si bien no se cerró mediante contrato y firma, todo indica que el shopping ayudará al club mediante un acuerdo de esponsoreo". Al mismo tiempo, el dirigente negó las intenciones del grupo empresario de incidir en los horarios de los partidos.
El motivo por el cual se habrían desencadenado los hechos, se trataría de una interna dentro de la misma barra que con este ataque al lugar, exigen participar dentro de los acuerdos comerciales entre el shopping y el club.
Matías Ponce de León
miércoles, 20 de noviembre de 2013
¨Nadie gana. Hagamos un mundo sin violencia¨
El astro del fútbol, Lionel Messi, realizó un spot para la Municipalidad de Rosario y la Fundación Leo Messi en contra de la violencia.
Rodrigo, uno de los hermanos del jugador del Barcelona, dialogó con Radio 2 desde España, y contó sobre el clip que realizó junto al periodista del Grupo Televisión Litoral, Sergio Roulier y dijo: ¨Para nosotros es un orgullo que podamos hacer algo en conjunto. Es bueno que podamos unirnos y hacer algo importante para todos. Estamos muy contentos¨. Además se refirió sobre la lesión que lo aqueja a Leo: ¨Él ya no tiene dolores y se está reponiendo anímica y mentalmente¨ y confirmó que parte de la recuperación, la hará en Argentina.
Belén
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