Otra vez escándalo. Otra vez Mendoza. Otra vez la Policía.

Insólito: la Policía mendocina reprimió con ¡gas pimienta! a dos jugadores de Chaca que le reclamaban a Lamolina por haber convalidado el 2-1 de Gimnasia, concretado 20 segundos después de que se cumpliera el tiempo adicionado.

 

Carniel, arquero suplente de Chacarita, luego de haber sido agredido por la policía

La violencia ya no es propiedad exclusiva de los hinchas. O al menos no lo es en Mendoza, donde las fuerzas de seguridad hacen hasta lo imposible para quedar en el ojo de la tormenta. Este sábado, en el marco del partido que disputaron Gimnasia y Chacarita, la Policía reprimió con ¡gas pimienta! a dos jugadores del Funebrero que le reclamaban al árbitro Lamolina el hecho de haber convalidado el 2-1 del local, concretado 20 segundos después de que se cumpliera el tiempo adicionado.

Los que sufrieron las consecuencias del gas fueron el arquero Gonzalo Carniel y el defensor Agustín Módula, ambos suplentes de Chacarita. Pero, aunque suene incoherente, no es la primera vez que la Policía de Mendoza queda envuelta en un escándalo como éste. En el 2005, hace ya unos cuantos años, ocurrió un hecho similar durante el clásico entre San Martín y Godoy Cruz: en medio de los incidentes, un efectivo de la fuerza le disparó a quemarropa a Carlos Azcurra, por ese entonces jugador de San Martín, que había intercedido al ver que sus familiares eran reprimidos en la tribuna. El disparo le dio en la zona del tórax, perforándole un pulmón y dejándolo al borde de la muerte. Luego de un tiempo Azcurra se recuperó, aunque recién pudo volver a jugar en el 2010, cuando ya tenía 32 años.

Antes de eso hubo un partido. Uno que, entre polémicas y fallos dudosos, terminó ganando Gimnasia. Milla había adelantado a Chacarita, pero Albornoz y Garín aparecieron para dar vuelta el marcador. Ese último gol, el del 2-1, desató el escándalo. Uno que en Mendoza tiene lamentables antecedentes...

Fuente: http://www.ole.com.ar/